El presidente del Consejo de Estado, Luis Alberto Álvarez, fue envuelto en una disputa nacional después de emitir un fallo que el gobernador del gobernador de Meta, Rafaela Cortés, en el proceso de doble ejército. Las disputas aumentaron aún más cuando Álvarez, unos días después, recibió un impuesto público del mismo presidente que apoyó la decisión judicial.
Reconocimiento
El episodio fue interpretado por varios sectores como una preocupación por la falta de imparcialidad. Aunque el fallo tenía apoyo legal, devolvió la proximidad temporal entre el tribunal y el reconocimiento de las sospechas. Para muchos observadores, la situación envió el mensaje incorrecto sobre la independencia de los tribunales en el país.
Anlvar había sido reconocido previamente por dirigir decisiones serias contra las cifras políticas de la izquierda, incluidas las pérdidas en las inversiones de tres inversiones parlamentarias y gobernadas, que contrariamente a su decisión por parte de Cortés, el líder de la alianza en el sector adecuado.
Aunque no se confirmó ningún acuerdo irregular, los críticos señalaron que el impuesto ha afectado la credibilidad de las instituciones. En redes sociales y medios de comunicación, los ciudadanos exigieron explicaciones tanto del magistrado como del gobernador.
¿El juez de admisión o el aliado? Se publicó por primera vez en | El diario de todos.