Un nuevo episodio de violencia sacudió a Cúcuta luego de que un joven de 23 años, identificado como Osman Andrés Bernal, fuera presuntamente asesinado a tiros en plena calle, delante de su madre.
El homicidio ocurrió hacia el mediodía del miércoles 12 de noviembre, en la intersección de la avenida 31 con calle 5N, en el barrio Tucunaré, según las primeras versiones recogidas por testigos. Dos hombres que se movilizaban en motocicleta interceptaron a Osman. Uno de ellos abrió fuego, acertando tres disparos: uno al rostro y dos más en la espalda. La víctima intentó huir, pero fue alcanzada a pocos metros y cayó al piso ya sin vida.
Su madre llegó al lugar segundos después del ataque y se encontró con la escena desgarradora: su hijo tendido sobre el pavimento. Quedó paralizada, en silencio entre el tumulto, mientras otros vecinos y la Policía acordonaban la zona.
Según residentes del sector, Osman era conocido en la comunidad y su historial se vio marcado por el consumo de sustancias psicoactivas. E incluso su familia ha dicho que él intentó rehabilitarse varias veces, pero sufrió recaídas.
Las autoridades investigan el crimen y no descartan que se trate de un ajuste de cuentas relacionado con microtráfico, dado el contexto del barrio. La Policía Metropolitana de Cúcuta ya recoge evidencias, como casquillos y grabaciones de cámaras de seguridad, para tratar de dar con los responsables.
Este hecho reaviva la preocupación por la violencia en la ciudad, especialmente cuando la familia asegura que Osman no tenía amenazas conocidas, lo que complica el panorama y genera zozobra en la comunidad.
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