El 12 de abril de 2025, se produce un giro significativo en la política comercial de los Estados Unidos, marcado por la aprobación de una nueva tarifa exclusiva que afecta a una gama de dispositivos electrónicos. Esta decisión incluye teléfonos inteligentes, computadoras y otros productos electrónicos que son mayoritariamente importados de China. Este cambio implica que esos productos estarán exentos de la mayoría de las tarifas elevadas que habían sido impuestas anteriormente, las cuales alcanzaban hasta un 125% de incremento. Estas tarifas fueron establecidas durante la administración del presidente Donald Trump, y su derogación representa un alivio considerable para el sector tecnológico estadounidense.
Desde la perspectiva de las empresas tecnológicas más grandes y reconocidas en el mercado, esta decisión resulta muy favorable. Compañías como Apple y Samsung, así como fabricantes de semiconductores como Nvidia, se encuentran entre los principales beneficiarios de esta normativa. La eliminación de estas tarifas no solo facilita la operación de estas compañías, sino que también puede traducirse en una reducción de precios para los consumidores, lo que a su vez podría estimular la demanda de dispositivos electrónicos.
En un anuncio relacionado, la Agencia de Protección Fronteriza y Border de los Estados Unidos (CBP) ha publicado un listado detallado de códigos arancelarios que quedarán exentos de los aranceles, con fecha de efecto retroactiva a partir del 5 de abril. El CBP ha catalogado un total de 20 categorías de productos, destacando un código amplio 8471 que incluye todas las computadoras, computadoras portátiles, así como unidades de disco y sistemas automáticos de procesamiento de datos. También se han incluido dentro de esta exención diversos dispositivos de semiconductores, equipos relacionados, chips de memoria y pantallas planas.
A pesar de que el aviso no proporciona una explicación directa desde el gobierno de Trump sobre este cambio de política, la exclusión de estos productos de última hora ha traído alivio a varios gigantes tecnológicos en Estados Unidos. Companies like Apple, Dell y muchos otros importadores han estado funcionando bajo una presión significativa debido a las tarifas. Este anuncio se puede interpretar como un intento de aliviar la carga que ha caído sobre el sector tecnológico.
Este movimiento constituye un paso considerable hacia atrás en lo que había sido una política de tarifas elevadas que había definido la administración Trump. De hecho, esta medida es considerada por analistas como una eliminación de «una enorme nube negra» que cargaba actualmente sobre el sector tecnológico, creando presión y desafíos para las grandes compañías tecnológicas estadounidenses. Según la firma de análisis Wedbush, este cambio podría ofrecer un respiro esperado en un ambiente comercial cada vez más desafiante.
Hasta el momento, tanto Apple como Samsung no han proporcionado comentarios sobre este anuncio, y Nvidia también ha optado por no hacer ninguna declaración al respecto. La espera de reacciones y estrategias futuras por parte de estas empresas se mantendrá en el centro de atención del mundo empresarial y tecnológico.