




El Conjuro 4 marca el capítulo final de la saga protagonizada por los investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren, interpretados por Patrick Wilson y Vera Farmiga. La película se basa en el caso real de la familia Smurl, ocurrido en West Pittston, Pensilvania en la década de 1980.
El caso Smurl: un hogar convertido en pesadilla
Entre 1974 y 1989, la familia Smurl, compuesta por Jack y Janet, sus cuatro hijas y los padres de Jack, se mudaron a una casa en West Pittston, Pensilvania, tras perder su anterior vivienda por una inundación. Lo que parecía un nuevo comienzo se transformó en una auténtica pesadilla.
Según los testimonios de la familia, todo comenzó con fenómenos leves: aparatos que se dañaban sin explicación, olores fétidos a basura y sangre, ruidos ños en las paredes y sombras que cruzaban las habitaciones. Sin embargo, con el paso de los años los sucesos se volvieron más agresivos: los muebles se movían solos, los cuadros se caían y golpes violentos retumbaban en las paredes a cualquier hora.
Presuntas agresiones físicas y sexuales
Los Smurl denunciaron que las manifestaciones llegaron al extremo de las agresiones físicas y sexuales. Jack aseguró haber sido atacado repetidamente por una entidad oscura, mientras que Janet relató haber sido arañada, empujada contra las paredes y hasta violentada por lo que describió como una “presencia demoníaca”.
Incluso las niñas dijeron ver figuras fantasmales, algunas con apariencia humana y otras con rasgos deformes y animalescos.
La familia vivió bajo este tormento durante más de una década, al punto de considerar mudarse varias veces, pero aseguraban que “las entidades los seguían” a donde fueran.
La intervención de los Warren
En 1986, los Smurl contactaron a Ed y Lorraine Warren, reconocidos investigadores paranormales. Tras varias visitas, los Warren concluyeron que en la casa había cuatro presuntas entidades:
- Un anciano inofensivo que solo se manifestaba ocasionalmente.
- Una mujer silenciosa que aparecía en las habitaciones.
- Un hombre violento y agresivo.
- Y un demonio de gran poder, que sería el verdadero responsable de las agresiones y del control sobre las demás presencias.
Ed Warren intentó varios exorcismos, pero según la familia estos solo lograron calmar temporalmente los ataques. Lorraine, médium clarividente, describió la casa como “uno de los lugares más oscuros” que había visitado en toda su carrera.
Exorcismos y controversia
En 1986, la Iglesia Católica autorizó un exorcismo oficial realizado por un sacerdote, pero la familia aseguró que las presuntas manifestaciones volvieron poco tiempo después.
Finalmente, hacia 1989, los Smurl decidieron mudarse definitivamente. Según algunos informes, los fenómenos disminuyeron con el tiempo hasta cesar por completo, aunque nunca se supo con certeza si el “demonio” fue expulsado.
El caso fue tan mediático que en 1986 el periodista Robert Curran publicó el libro The Haunted (La Casa Embrujada), con el testimonio directo de la familia. En 1991, incluso se hizo una película para televisión sobre la historia.
Adaptación en El Conjuro 4: Últimos Ritos
La película retoma estos hechos pero, como es usual en la saga, agrega elementos de dramatización para intensificar el terror. Allí se muestran los momentos más fuertes:
- Los ataques demoníacos a Jack y Janet.
- Los objetos que flotaban y se estrellaban contra las paredes.
- La desesperación de las niñas al ver presencias en sus habitaciones.
- La intervención de los Warren en uno de los casos más desgarradores de su carrera.
Aunque Últimos Ritos marca el cierre de la saga principal de los Warren, muchos fans señalan que también deja abierta la posibilidad de que la historia continúe a través de Judy Warren, la hija del matrimonio, quien en la vida real también ha sido testigo de fenómenos paranormales.
Un caso aún en debate
Hasta hoy, el caso Smurl sigue siendo uno de los más polémicos en la historia de los Warren.
- Para algunos, se trató de un ejemplo claro de infestación demoníaca.
- Para otros, fue simplemente una mezcla de estrés psicológico, histeria colectiva y sugestión.
Lo cierto es que los Smurl vivieron 13 años de lo que describieron como un infierno en la tierra, un relato que ahora cobra nueva vida en la gran pantalla con The Conjuring 4: Last Rites.
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