Antes del avance de la fiebre amarilla en el departamento, el gobernador Adrian Matiz ha dedicado esfuerzos significativos para equilibrar las diversas actividades que su administración ha desarrollado desde el año anterior. Su principal objetivo ha sido la contención de la propagación del virus que ha afectado a la población local, priorizando la salud y el bienestar de los ciudadanos.
En un diálogo que sostuvo con medios de comunicación a nivel nacional, Matiz enfatizó que la respuesta del gobierno ha sido tanto rigurosa como sostenible, subrayando la importancia de la colaboración entre diversas entidades, incluidas las Empresas Promotoras de Salud (EPS), hospitales, alcaldes y fuerzas del orden. Esta colaboración es crucial para enfrentar de manera efectiva la crisis de salud pública.
Actualmente, según lo informado por Matiz, el departamento cuenta con 189 puntos de vacunación activos, donde se han administrado más de 100,000 dosis de la vacuna contra la fiebre amarilla. Además, se han llevado a cabo estaciones de control en carreteras ubicadas en los municipios más afectados, con la participación no solo de las brigadas de salud, sino también del ejército y la policía nacional, quienes han sido fundamentales en esta lucha epidemiológica. Resulta relevante mencionar que alrededor del 90% del personal de las fuerzas públicas que opera en estas áreas ha recibido la vacuna, lo cual resalta el compromiso de las instituciones ante la crisis sanitaria.
A partir de octubre de 2024, cuando se reportaron los primeros casos de la fiebre amarilla, el gobierno departamental llevó a cabo cinco reuniones de gestión de riesgos, lo que resultó en la declaración de desastres públicos y desgracia pública, medidas que fueron adoptadas para fortalecer las limitaciones y actuar de manera más proactiva ante la emergencia.
Las inversiones realizadas en esta campaña de salud superan los USD 5,565 millones, lo cual incluye contratos vigentes con hospitales, la contratación de personal médico y la adquisición de equipos para la atención primaria de salud. Este esfuerzo financiero demuestra la gravedad con la que el gobierno está tratando la situación sanitaria.
“Desde enero hemos comenzado a implementar reuniones semanales de comando, y en la actualidad, durante la Semana Santa, las estamos llevando a cabo a diario. Hemos activado todas nuestras capacidades institucionales con el fin de proteger la vida de todos los tolimanos”, dio a conocer el gobernador Matiz durante su discurso.
Asimismo, Matiz dirigió un mensaje claro y directo al Presidente de la República, instándolo a evitar politizar la crisis de salud. Expresó su frustración ante la falta de acción eficaz: “El Presidente, el 26 de marzo mencionó que el Consejo de Ministros había indicado que el gobierno estaba controlando la explosión de la fiebre, y cuando se dan cuenta de que esa no es la situación, comienzan a buscar culpables. Esto no es un juego; no es momento de encontrar culpables, debemos centrarnos en llevar a cabo todas las acciones posibles para salvar vidas”.
Finalmente, Matiz mencionó que ciertas organizaciones religiosas han presentado obstáculos que dificultan los días dedicados a la vacunación. En este contexto, solicitó apoyo a la Dirección de Libertad Religiosa para garantizar el acceso a las vacunas en todo el territorio. “La defensa de la vida debe prevalecer sobre cualquier fe o interés político. Aquí continuamos, sin descanso, uniendo esfuerzos desde cada rincón”, concluyó Matiz.
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